N3331, la cafetería situada en un antiguo andén entre las vías del tren

N3331 es el nombre de la cafetería ubicada en los andenes de la antigua estación de Manseibashi, que se situaba entre las paradas de Ochanomizu y Kanda, de la linea Chuo. Dicha estación ya no existe, pero los trenes siguen pasando por sus vías, como se puede ver en las fotos. De hecho, la estación es conocida entre algunos amantes de los trenes, como la estación fantasma. La cafetería tiene acceso a través del centro comercial mAAch ecute, el cual me recordó al Aka-Renga de Yokohama por el estilo y, lo primero que llama la atención, es que las escaleras para subir al andén son las originales que tenía la estación. Un detalle muy curioso, puesto que se conservan las paredes de la época y tiene una atmósfera antigua, completamente diferente al aspecto actual de la cafetería. Como vemos, en cuanto subimos las escaleras nos encontramos con una estética mucho más moderna, que no tiene nada que ver con lo que nos enseñaban las escaleras antiguas. El cartel, que pone N3331 CAFE & 和酒 (N3331 Café y licor japonés) nos da la bienvenida a una cafetería actual, casi de diseño, construida prácticamente con paredes de cristal para que los clientes puedan sentirse rodeados por los continuos trenes que pasan por

Fukuro cafe

Hace un tiempo en Japón se pusieron de moda los neko cafe (猫カフェ), cafeterías donde puedes pasar el tiempo rodeado de y jugando con gatos. De hecho, son bastantes famosos fuera de Japón y prácticamente todo el mundo ha visto algo de estos lugares por internet. Sin ir más lejos, hay un neko cafe incluso en Madrid. Pero lo que la gente no suele conocer es que hay más cosas por el estilo en Japón, que no tiene por qué estar relacionado con los gatos y, en esta ocasión, os voy a hablar de los Fukuro Cafes, o cafés de búhos. Al igual que los neko cafes, es un lugar donde se puede estar tomando algo rodeado de búhos. Obviamente un búho no es igual que un gato, y en este caso, las zonas de consumición y de recreo están en habitaciones separadas, por motivos de seguridad e higiene sobre todo. La mecánica es bien fácil, aunque puede variar según el local. Se paga por tiempo, generalmente 30 minutos o 1 hora, en el que puedes hacer lo que quieras. En este caso estaba incluida una consumición y excepto unos 5 o 10 minutos que tuvimos que esperar al principio para descanso de los animales, puedes distribuir tu tiempo como