Porque a veces, la perfección sí que existe, y está en las cosas más pequeñas.
En concreto, es una rosa de las que se pueden encontrar en la Alcazaba de Málaga.
Tomada hace tiempo con una cámara Canon EOS 450D y un objetivo EF 70-200 USM 2.8L IS, podéis ver los datos EXIF como siempre dándole al enlace de la derecha.