Las cataratas Nunobiki

4
Mar
2018
Categorías: Japón

Después de haber visto la grandiosa estatua del Tetsujin-28, decidí que sería bueno acercarme a mi siguiente punto de visita: las cataratas Nunobiki.

Es curioso como hago mucho más senderismo en Japón que en España. Ahora, al monte Takao (varias veces), Mitake, Nokogiri en Chiba, Hakusan en Ishikawa, Misen en Miyajima, e incluso el monte Fuji (más los que se me olvidan), añado a mi lista de montes paseados el que se encuentra en Kobe para visitar las cataratas Nunobiki.

Como siempre en estos casos, el viaje completo es lo mejor en sí, y el destino es solo una parte del viaje, no lo principal (y más teniendo en cuenta que, aunque estuviese lloviendo un poquito, el caudal de agua que me encontré era minúsculo en comparación con otras épocas.

El recorrido es super sencillo, se empieza desde la estación de Shin-Kobe y no lleva más de una hora en subir hasta la cascada y bajar de nuevo

Por el camino nos iremos encontrando elementos del Japón más rural, como son las típicas casas perdidas en mitad del monte, mucho más espaciosas que las que podemos ver en la ciudad. Con su diseño tradicional y su exceso de confianza. Y es que algo cosa que pienso a lo que me he acostumbrado es, que muchas casas del entorno rural no tienen seguridad ninguna. Ésta por ejemplo está ahí, abierta de manera que todo el mundo que pase se podría llevar algo, pero nadie lo hace.

Y me doy cuenta de que me he acostumbrado a esta situación porque me parece natural, pero que si me paro a pensarlo, en el extranjero sería algo impensable.

Otros elementos que suelen ser comunes subiendo una montaña son los mini templitos donde encontraremos grabados en piedra, figuras representando divinidades, budas, etc. con sus ofrendas y sus inciensos.

Además, si se sigue subiendo por este camino se llegaría a un punto mucho más alto desde donde se puede ver toda la ciudad. Eso sí, está bastante más lejos (aunque hay teleférico) y yo ya tenía reservada mi noche para el puerto y el barrio chino.

Aún así, aunque estuviese lloviendo, fue un buen momento para desconectar de la ciudad dando un paseo por el campo, antes de poder ir a la casa que alquilé a dejar la mochila (recuerda que llegué de buena mañana a la ciudad y aun no podía hacer checkin)

Pero el dejar la mochila tendría que esperar aún un rato, porque al bajar me iría al barrio europeo de Kitano Ijinkan, también muy cerquita de la estación de Shin-Kobe (realmente todo esta muy cerquita en Kobe, que es una ciudad bastante pequeña).

Pero Kitano Ijinkan quedará para la siguiente entrada.